Puede ser que cuando escuches la palabra “fraude” en e-commerce, lo primero que te venga a la mente sean los contracargos, y no te equivocas, los contracargos casi siempre son compras fraudulentas.

Pero, ¿y si los contracargos no son un problema para tu e-commerce? Supongamos que tienes una tasa de 0% de contracargos. ¿Entonces podríamos decir que el fraude no afecta a tu negocio? No directamente.

Los contracargos son solo la punta del iceberg. Hay un impacto indirecto mucho más profundo que puede afectar seriamente a tu negocio: Los falsos positivos.

¿Qué son los Falsos Positivos?

Un sistema antifraude monitorea continuamente las transacciones de tu e-commerce, y si sospecha que alguna puede ser fraudulenta, la rechaza, indicando que dio un resultado “positivo” a su detección de transacciones fraudulentas.

¿Todas estas transacciones que “dieron positivo a fraude” lo son realmente? La respuesta es no, algunas se clasifican así de manera errónea, dando como resultado un falso positivo, por lo que el sistema antifraude detiene también algunas compras que en realidad eran legítimas.

¿Cómo afectan los falsos positivos a tu e-commerce?

Sigamos en el supuesto de que tu e-commerce tiene una tasa de 0% de contracargos. Para esto estás pagando una herramienta antifraude que te ayuda a olvidarte de ellos. Pero ¿cuántas ventas legítimas has rechazado tratando de prevenir los contracargos? Difícil de medir.

Según un estudio publicado en 2020 de la empresa de investigación de mercado y análisis de datos LexisNexis Risk Solutions, un 58% de las transacciones rechazadas son falsos positivos. Esto es alarmante considerando que en México el 35% de los pagos con tarjeta en comercio electrónico son rechazados, y que al mismo tiempo, el fraude crece tres veces más rápido de lo que crece el comercio electrónico en el país.

Además, según datos de la AMVO, el 32% de los clientes que se rechazan equivocadamente no regresan a comprar en esa tienda en línea. Entonces, para ir sumando, en este supuesto tu comercio paga por una herramienta antifraude, pero además pierde las ventas que deja ir por rechazar transacciones, y encima pierde a estos usuarios que nunca regresarán por tener una mala experiencia de pago.

Para verlo en números, supongamos que tu mismo negocio (que disfruta de ser libre de contracargos) recibe 10,000 “intentos de pago” al mes con un ticket promedio de $500 pesos.

Tu comercio tiene el potencial de recibir un ingreso bruto al mes de $5 millones de pesos sin contar comisiones (10,000 x $500).

Pero hablamos de “intentos de pago” porque el 35% de estos son rechazados, por lo que deberás descontar $1.75 millones de pesos a tu potencial ingreso bruto.

Además considera que de esos 3,500 intentos de pago, 2,030 eran ventas legítimas que rechazaste. Al rechazarlos creaste una terrible experiencia de usuario, por lo que olvídate de estos clientes en el futuro…

Entonces, al final de un año habrás dejado de recibir más de $12 millones de pesos por transacciones legítimas, y además esos clientes asociarán una mala experiencia de compra a tu marca, por lo que el costo crece y crece. Y eso que no mencionamos las comisiones de las tarjetas ni lo que pagarías por tu herramienta antifraude.

El Trade-off

Este problema es un ejemplo de lo que muchas tiendas en línea experimentan cuando buscan enfrentar los pagos fraudulentos con tarjetas, y muchas veces ni siquiera lo saben. Como lo vimos, más allá de lo costoso que resulta intentar mitigar el fraude, esto tiene un impacto negativo en la experiencia de tus clientes, en la fidelidad de los mismos, y en la reputación de tu negocio.

Aceptar pagos con tarjeta implica un trade-off entre la experiencia de pago y el fraude. Esto además de las altas comisiones que debes pagar… ¿Por qué debes enfrentarte a esto al recibir pagos en línea?

Elige un medio de pago que te permita enfocarte en incrementar tus ventas sin tener que preocuparte del fraude, y ni mencionar los Falsos Positivos. Las tarjetas no fueron hechas para pagos en línea. Fintoc si.

Aceptar pagos con Fintoc te permite mejorar la experiencia de pago, olvidándote de los contracargos, y por lo tanto de necesitar un sistema antifraude. Esto mientras ahorras hasta un 50% en comisiones.


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Si ahora te das cuenta que también eres una víctima indirecta del fraude, contacta a nuestro equipo de ventas aquí.